Casi no me doy cuenta…me estoy despidiendo de mí…y de ti.No alcanzaba a razonar, porqué quería recorrer todo, alargar mi estadía donde mis amigos, mis casi hermanos, Claudia y Sergio, su casa, tranquila, hermosa, al costado de un arroyo en Tübingen, mis paseos en bicicleta me permitieron hacer mas difícil tomar conciencia del problema …nuestros pequeños viajes a Schaffhausen y Zurich, la música y de vuelta hacer un « background » de Los pájaros perdidos, que me hacía el Pinto, y…No se si fué el reescuchar el texto una y otra vez , darme cuenta que no era lo que yo quería o entendía , siempre creí al escucharla que era una canción dedicada a los muchos pájaros todos los que andan por ahi, desaparecidos o perdidos de sus tribus; en la vorágine de este sistema , pero ahora me daba cuenta …que bien me quedaba ! Era yo la pájara perdida, era yo la que no quería llegar allí, y que no estuvieras. Era mas fuerte que hace 25 años ,cuando regresé a Chile y nos fuiste a dejar a Charles de Gaulle, nos despedíamos y a medida que la escalera mecánica subía ,tu imagen se iba achicando y lo último que ví fueron tus zapatos.

El volver a caminar, a ver los viejos puentes del Sena, al entrar al metro y oler la humedad , recorrer la estación Auber buscando tal vez una casquette perdida, esa que se te cayó hace años y que tan triste te dejó perderla, pues yo te la había hecho en Chile.

El volver a sentir el calor del metro, lleno de gente con la calefacción insoportable, para el apuro y nuestras ropas…aquella vez fue contigo y el bebé buscando la combinación para encontrar Gare Saint Lazare para volver a nuestro hogar en Colombes, 25 Rue Jules Michelet, «la torre infernal» en el 28 piso .Tan alto, tan distinto a nuestra parcelita de Lo Cañas, con su calle de tierra, los 40 paltos y el portón de madera abierto para que entraran los amigos …Ahora es Chañaral quien me lleva con la misma prisa ,esta vez a Gare de l’Est para ir a Alemania y …llegar a Berlín… también un escenario que vivimos, hoy « un poco cambiado »,pero allí un oso me miró afuera del hotel donde esa vez, año 75 en Under den Linden nos tomamos una foto con la María Inés Radrigan , Marianoff y el Gitano Rodríguez.Tú hacias la música para las películas de Haynowsky y Scheüman con los Aparcoa y yo miraba asombrada los presos de Chacabuco en la moviola ,pues me habías llamado a Paris y me habías dicho que vería a mi amigo Virgilio Figueroa, pero no me habías dicho que lo vería en la película, yo creía que lo vería en Berlín, pero exilado…allí estaba pero en la pantalla con sus inmensos ojos azules, enojado pues él no sabía que los camarógrafos que lo grababan eran camaradas…que dignidad en su mirada !…Berlín hoy, tu hijo estrenando su « Tupac Amaru »con el cuarteto Arditti y yo sin poder criticarte esta vez porque no te haz hecho un tiempo para venir a tan importante evento, pero esta vez no has venido…porque ya estás en Chile. Recién llegada a Paris,fuimos de noche ya a Nanterre a la casa de la « mamita», única casa que aun existe y en la que puedo recordarte, aunque no muy alegremente, pues era a esa casa que ibas a buscar a Chañaral los días domingo para llevarlo a la que fue nuestra casa 21, rue Daniel Becker…hoy ya no existe y de regreso con Alyss en su citrola volvemos a Paris por el Bb. Clemanceau, allí trato de acordarme de la calle en que te esperaba en el escarabajo cuando volvias de una reunión en bus, creo haber reconocido la subida donde te iba a buscar , rue de la Source porque era allí la parada del bus ,era de subida y tu venías de la reunión de la dirección del partido, eras encargado de organización,y como a veces hacía muchofrio porque estaba nevando, y también porque te regaloneaba , te iba a encontrar.

Pero encuentro parte de nosotros también cuando recorro les Champs Elysees y veo los cafés con las mesitas típicas…por allí, en uno de esos estuvimos con el tío Salo cuando vino en uno de sus viajes , o con la Lucía Díaz, o con Claudio…De pronto veo un afiche…algo pasa aun en el teatro Des Amandiers…hace 29 años ensayabamos « Que hora será enValparaíso »de Pierre Debauche y tu música y el Grupo Canto General, allí el Indio Pavéz le tocaba cantar «entre morir y no morir me decidí por la guitarra», sabía que se iba a morir y estaba feliz de decidirse por la guitarra, el teatro era un viejo galpón , allí trabajamos , pero lo alcanzamos a vivir nuevo en 7 rue Pablo Picasso, allí esquina de Salvador Allende ,hoy debe estar precioso, pero el viejo tenía su magia… allí con un técnico con Daniel Ragún, grababamos tus canciones para mandar a la Radio Moscú, entonces me bautizaste América Chacón, como antes me pusiste Bestia Planete y cuando al bate se le ocurrió que yo parecía una « sirena de verdad » y que las sirenas de verdad eran Manaties y me «hizo el honor» de bautizarme Manatí me negué a aceptar tan importante bautizo, pues me pareció que don Pablo me estaba encontrando tan gorda como una vaca marina y se lo objeté al mismísimo Neruda! …Muy elegantemente , pero molesto por mi irreverencia arreglaste la situación y desde ese momento fui BPM, abreviando así Bestia Planete Manatí .Bueno pero ese capítulo es de Chile y de Marzo del 73 ; y te estoy despidiendo aquí, seguramente ni te habría visto si estuvieras acá y no estaría triste sinó enojada o sentida porque no me habrías dado bola.Pero creo que a travéz de todos estos años nos fuimos queriendo de otra manera, y lo sentía cuando cómplice me tocabas la cabeza me hacías un cariño loco y me preguntabas si aun estaba allí la lenteja… eran nuestras bromas secretas y nos reíamos, esa era tu manera de decirme que la reconciliación existía . Cuando fuiste esta vez a Chile y andabas loquito con tu ahora Opera «Fulgor y muerte de Joaquín Murieta» y un nuevo amor, Isadora , y me llevaste a Celine que hacía un documental sobre ti y fuimos al CC del Partido a grabarte con Guillermo y Gladys … » y de pronto les dijiste «lo importante que fue esta Señora »…creí hablabas de otra persona, pero hablabas de mí y me dió mucha ternura…menos mal que te llamé para decirtelo y agradecerte …creo que intuías lo que venía. Hace 20 días que estuve arrancando de la tristeza, refugiándome en Tübingen, donde nunca estuvimos…y allá viendo unas fotos de veraneo de mis amigos, pregunto donde fueron a veranear?…dónde es esa playa ?…y me contestan… Montalivet (dónde en el 75 veraneamos con los quila en el campamento «turismo y trabajo»)… Y allí me doy cuenta que te puedo encontrar en mi memoria en cualquier parte, que no puedo seguir huyendo…y viajando en el tren te comienzo a despedir de verdad …y aun así espero encontrarte en Gare de l’Est.